Esta invisible enfermedad, se le llama Morgellons, y se trata de un tipo de nano-invasor que penetra en el cuerpo humano.
Tiene la particularidad de que es una enfermedad silenciosa, inteligente, y cuando ataca a su víctima ésta se siente como si tuviera piezas de cristal roto por todo su cuerpo, es 150 veces más pequeña que los virus, y se les conoce como virones, es invisible al ojo humano, y sólo quien es atacado por esta enfermedad conoce su verdadera naturaleza, ya que actúa de forma silenciosa.
Como siempre topamos una vez más con que todo indica que es obra de la manufactura del hombre, ya que los materiales microscópicos que forman parte de las fibras y filamentos de los morgellons se emplean en fármacos de última generación, fármacos, químicos y biomateriales, nervios artificiales etc.
Por otro lado se dice que son los Morgellons originados por los aviones que fumigan secretamente en nuestros cielos.
Según se cuenta la primera vez que se dinástica esta enfermedad y es nominada fue en el 2002, a consecuencia de la disipación de elementos, partículas y sustancias de diverso origen en el aire se la llama MORGELLONS y fue por primera vez nombrada en 2002 por Maria Leitao en McMurray.
Esta señora estudiaba entonces la enfermedad de su propio hijo de entonces dos años.
Como siempre pasa, hasta este día en que la señora comenzó a investigar, pocos doctores habían oído hablar del morgellons, aunque probablemente ya habría cientos de casos, como el de su hijo, en Estados Unidos y entre otros países.
Fue desde entonces y aún hoy, como suele ocurrir con enfermedades de las cuales los profesión médica aun no se ha hecho eco, o no se ha lanzado ningún producto farmacológico para tratar sus síntomas. La enfermedad no era reconocida por la gran parte de la comunidad médica y asociaban los síntomas con la enfermedad de Lyme o una enfermedad mental llamada Delusional Parasitosis, que es la idea de algunos enfermos que por razones sicosomáticas, sienten síntomas equivalentes a los que tendrían si estuvieran siendo atacados por parásitos tales como ácaros, piojos, pulgas, arañas, gusanos, bacterias, u otros organismos.
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